sábado, 7 de enero de 2023

La reconciliación con un amigo muerto

“Hoy en la madrugada me dirigí a la biblioteca del Neo V, que por alguna razón extraña se encontraba en la parte baja de un edificio que asumo era mi trabajo, o simplemente algún lugar al que debía ir.

Bajé las pocas escaleras que me llevaron hacia el cortísimo pasadizo donde estaba instalada  temporalmente, se supone, la biblioteca. Lo que pude entender es que era algo así como una especie de exhibición muy reservada, “solo para conocedores”.

La sala era muy reducida y tenía al medio una columna que no dejaba ver bien todo el lugar, sin embargo a pesar de eso desde la entrada pude distinguir a José Luis, el bibliotecario del club, conversando con alguien a quien la columna ocultaba. Me dirigí hacia el para saludarlo y fue al pasar la columna cuando me quedé helado. ¡Sentado junto a él estaba Max, Max Kabsther!.

No entendía nada y me quede viéndolo sorprendido, pero mecánicamente extendí la mano para saludarlo, y mientras lo hacía solo atine a balbucear que me habían dicho que él había muerto por el Covid, y le confesé que cuando me enteré no pude evitar las lágrimas.

Max había extendido su mano respondiendo a mi saludo, pero cuando escuchó mis palabras, el estrechar de manos se convirtió en un fuertísimo abrazo y ambos nos pusimos a llorar como niños que compartían una misma tristeza”.

Max Kabsther fue un compañero de aventuras y gratos descubrimientos musicales allá a fines de los 90s, que falleció el año pasado víctima del Covid19.

Inicialmente miembro del NeoV, (nuestro club de aficionados al manga y el anime), Max asumió la producción televisiva que la revista SUGOI iniciara en el Canal 33 de la UHF, llamado SUGOI TV.

Poco tiempo después yo también me uniría al equipo de producción y fue cuando iniciamos una breve pero, para mí, inolvidable amistad a través de la música que nos gustaba mucho, el rock de los 80s y 90s.

Grabamos e intercambiamos muchos cassettes y CDs de buena música e incluso asistimos un par de veces a Bauhaus, la mejor discoteca del mundo, llegando a pasar un año nuevo ahí.

Lamentablemente meses antes que yo decidiera viajar fuera del Perú, Max decidió romper la amistad sin mayor explicación. Y aunque nunca me quedo claro la razón, creo sospechar el motivo.

Durante mucho tiempo pensé que a pesar de su actitud dura e injusta hacia mi, algún día que viajara a Lima tendríamos la oportunidad de conversar y aclarar que fue lo que lo llevo a actuar así, pero más que nada a retomar nuestra amistad.

Lamentablemente el Covid19 se lo llevo, y truncó esa oportunidad.

Hasta hoy en la madrugada……